Reciba Diario Masónico en su e-mail

shadow

Efemérides: Batalla de Pichincha


shadow

Efemérides: Batalla de Pichincha

 

 

 

En las faldas del volcán Pichincha, a más de 3.000 metros de altitud sobre el nivel del mar, cerca de la ciudad de Quito (actual Ecuador), y en el contexto de la Guerra de Independencia Hispanoamericana, tiene lugar la Batalla de Pichincha, como resultado del fracaso de las conversaciones de paz con el nuevo gobierno constitucional español, de signo liberal.

El nuevo gobierno se niega a aceptar la emancipación de los territorios, al igual que hiciera el anterior gobierno de corte absolutista. La batalla concluye con la victoria de las tropas independentistas del mariscal Sucre, frente a las tropas del jefe realista José Aymerich,suponiendo la independencia del territorio que constituye la República de la Gran Colombia (las actuales Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá), lo que hará posible la liberación del Perú.

Al día siguiente, Sucre entrará con su ejército en la ciudad de Quito, y aceptará la rendición de todas las tropas españolas establecidas en el territorio, escidiéndose de esta manera de lo que se denomina Presidencia y Audiencia de Quito. (Hace 194 años).

El sacrificio de Abdón Calderón

La Batalla de Pichincha fue el escenario del sacrificio por la patria de uno de los más destacados héroes ecuatorianos, el cuencano de 18 años Abdón Calderón. Calderón, quien fue hijo del coronel cubano Francisco Calderón, defensor del Estado de Quito de 1812, vivía en Guayaquil y se enlistó en las tropas de origen ecuatoriano que combatieron en la Batalla.

Calderón, a pesar de haber recibido 4 heridas de bala, prefirió permanecer inamovible en la línea de fuego, alentando a todo su batallón y levantando incansablemente la que es ahora la bandera celeste y blanco de la ciudad de Guayaquil. Al terminar el feroz combate fue trasladado a la ciudad de Quito, donde murió al cabo de catorce días, el 7 de junio de 1822. Antonio José de Sucre en su escueto parte de la Batalla de Pichincha, fechado el 28 de mayo del aquel año dice: » […] hago una particular memoria de la conducta del Teniente Calderón, que habiendo recibido sucesivamente cuatro heridas, no quiso retirarse del combate.

Probablemente morirá, pero el Gobierno de la República sabrá compensar a la familia los servicios de este oficial heroico».

Cuando Simón Bolívar llegó a la ciudad de Quito y se enteró de estos hechos, ascendió póstumamente a Calderón al grado de capitán y decretó que su sueldo fuera entregado a su madre. La compañía del Batallón Yaguachi a la que perteneció Calderón no tendría capitán y en las revistas, al mencionarse su nombre, la tropa habría de contestar: «Murió gloriosamente en Pichincha, pero vive en nuestros corazones». La tradición se mantiene hasta la actualidad en el Ejército ecuatoriano, pues al pasar lista a los batallones de caballería se lo nombra como dispuso Bolívar.

En la obra «Leyendas del Tiempo Heroico» del escritor Manuel J. Calle se narra la muerte de Calderón con una serie de hipérboles, destacando que a pesar de sus graves heridas en las cuatro extremidades, se negó a abandonar el campo de batalla.

 

 

 

 

 

Publicado por:

Garibaldi

Contenido Relacionado

shadow

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.