Se viven en la GRAN LOGIA DE ESPAÑA momentos de tensión interna en aumento y hacia la deconstrucción. De los tres Pasados Grandes Maestros vivos, dos están fuera de la GLE y solo uno está dentro, y los tres en total disconformidad con las formas y el fondo del actual Gran Maestro y uno de los permanentes candidatos a Gran Maestro ha publicado una carta en la que indica que o bien el actual Gran Maestro ha cambiado o bien le ha engañado en su buena fe.

No es ni ha sido el único.

El Colegio Invisible “Grupo de Covadonga”, como sucesor a titulo universal del “Grupo de Montserrat”, no es un instrumento de poder de nadie, sino un espacio de reflexión en positivo a la búsqueda de la vocación masónica española, la armonía, el dialogo y el pacto para una masonería española real. Este documento no puede ser vinculado con ningún movimiento dentro de la GLE.

Por lo que se puede conocer y escuchar dos son los problemas fundamentales, en relación simbiótica. El primero es el verdadero problema, al mantener, en términos políticos, controlado al segundo, propiciando la ignorancia con la buena fe de la mayor parte de los hermanos británicos. El primero ha de ser solucionado, entre todos, británicos y españoles, y respecto al segundo los puentes se tenderán en el momento en el que se solucione el primero y con ello se cambien las dinámicas de comunicación hacia una integración y comprensión real y franca entre el elemento extranjero y el español de la GLE, a la que todos los hermanos están abiertos, tanto los británicos como los españoles, como los de otras grandes logias de origen.

El primero, su actual cúpula directiva.

Lo que sólidamente se cuestiona, en la GLE, es su capacidad para entender el arte Real, para comprender la forma en que han de realizarse los comportamientos personales en público y en privado, redes sociales, y el gasto de los recursos económicos de la obediencia. Entre las logias y los masones de base, los gastos y política de gran logia nacional e internacional, ¿para qué sirve la posición internacional disfrutada por una minoría, si los locales son de calidad media baja en general…y eso cuando hay locales y no hoteles? Los primeros cuatro años del actual Gran Maestro pasaron desapercibidos debido al agotamiento por las duras tensiones anteriores, comparables a las actuales. Se trataba de dejar hacer y aprovechar el cansancio. Ciertamente contó en los primeros tiempos con la incorporación de cuadros valiosos procedentes del Grupo de Montserrat. Pero en el segundo mandato, y en lo que se lleva de tercer mandato, se ha producido un sorprendente giro hacia posiciones, declaraciones, comportamientos, manifestaciones, que han merecido reproche y que afectan a la regularidad o irregularidad, y relacionados con comportamientos calificados de políticos. La ultima sacudida ha sido un video con declaraciones sobre Venezuela que podrían seguramente no ser, ni a título individual, lo que se espera de un gran Maestro, Otras declaraciones por ejemplo en el Diario “El País” tampoco parece que confirmen que estemos ante episodios aislados o meramente anecdóticos. La imagen de la masonería regular que se pretendía limpiar, se ha vuelto a distorsionar y sin que otras obediencias participen de esta misma imagen.

El segundo, el factor Inglés.

Por su mala gestión se está convirtiendo en un auténtico “tumor” que afecta a la esencia del futuro de la masonería regular en España.  Se comportan muchos de los hermanos británicos, dentro de la GLE, no todos, por la información que reciben o por el trato que se les da, como una bolsa de votos controlados o dirigidos por el Gran Maestro mediante los grandes oficiales provinciales británicos, hacia la configuración de una “gran logia de hecho”, dentro de la GLE, que mira, no hacia la totalidad de la organización sino hacia su propia organización. Los objetivos de muchos hermanos ingleses, no todos ya se ha dicho, pero los suficientes para la actual dinámica, se basan en sus propias necesidades. Esto ha dado lugar a una dinámica insana, consentida por el Gran Maestro en su propio interés de poder, que está llevando al resquebrajamiento de la unidad, para ir poco a poco generando un cisma: el elemento español en las provincias donde no existe convivencia con hermanos ingleses, como Castilla ( Toda la cornisa cantábrica, mas las dos castillas, menos Madrid, la Rioja, Navarra, Extremadura y Aragón), o Cataluña, y el elemento británico en las zonas turísticas, como Baleares, Canarias, Murcia y Valencia, con la única excepción de Andalucía, y ello gracias al talante personal integrador de su gran maestro provincial inglés. Esto ha llevado a la reticencia entre unos y otros en territorios donde conviven, en muchas ocasiones de espaldas, se  trabaja en Ingles, documentos emitidos en inglés, interpretaciones  literales automáticas, traducciones de documentos al inglés, dificultades cuando no imposibilidad de comunicación lingüística, poca permeabilidad en relación con la sociedad española y con la masonería española; lo que aparece en general y salvo excepciones, es una masonería inglesa para y por los hermanos ingleses, agrupada en torno al rito mayoritario británico y a los cuerpos colaterales como el Arco Real, la Marca, el Temple, Monitor Secreto o KTP. En la G.L. P. De Valencia en torno al 16% de Grandes oficiales son españoles, el 84% restante no lo es. Asimilar la forma inglesa de hacer masonería a la idiosincrasia de la sociedad española no ha funcionado, y los cuerpos colaterales en muchos casos no han sido aceptados por los masones españoles con la empatía suficiente para su consolidación propia

De otro lado la masonería que busca una vocación española, dentro de la GLE, no puede trabajar, por el freno existente y por la desilusión de la contradicción entre principios y organización institucional. Con gran flujo de entrada y salida de miembros no se crea un elemento de estabilidad, una meseta de tranquilidad, y otras obediencias consideradas, diez años atrás, como minoritarias, cuando no miradas con superioridad, han ido trabajando en una línea muy acorde con los principios masónicos y no es descartable que consigan el liderazgo de la masonería en nuestro país en un plazo de unos quince años, si la GLE no encuentra solución a sus factores degenerativos. Obviamente el elemento ingles ira en disminución, edad, brexit, falta de recambios de membresía, pero el elemento español, debido a la política de la actual dirección de la GLE no tiene la capacidad atractiva suficiente para llegar a configurar una masa crítica de calidad ni en la obediencia ni en la sociedad.

La masonería regular en España está en una encrucijada y no ha consolidado la vuelta del exilio del GOE.

El Gran maestro debe dar paz, gestionar el elemento extranjero y particularmente el británico de acuerdo con los intereses generales de toda la obediencia, hacer una manifestación pública inmediata de renuncia irrevocable a un cuarto mandato y dar un paso atrás ya, una nueva generación de líderes ha de prepararse para un cambio que el GM  no ha conseguido ni conseguirá ya con la tensión existente. Suya es la responsabilidad máxima, bien por acción o bien por omisión o lo que es peor, por acción omisiva y a él le corresponde tomar las medidas necesarias, y estas no son ni la represión interna ni las fobias personales ni el mantenimiento de una situación interesada.

La Gran Asamblea de la GLE a celebrar en Valencia, provincia de mayoría de grandes oficiales ingleses, sacada de Cataluña, lo contrario , ni quitará ni añadirá nada a la situación si no da ese paso.

Esto debe acabar por bien de todos, ahora.