Masonic Vip Club International presenta:
” “Diez Minutos con Toni Ferri”
Toni Ferri y la belleza del movimiento
En la Marina Baixa, donde se erige Callosa d’en Sarrià, partida por dos ríos y rodeada de las sierras de Aitana, Bernia y Aixortá, este Licenciado en Bellas artes y Graduado en Artes Aplicadas y Diseño Gráfico, ejerce su magisterio.
El devenir de la naturaleza brilla la libertad en la que se manifiesta su obra: el arte como movimiento, o mejor, ¿las personas y la vida como progresión constante?
El arte del maestro Ferri me conmueve por la belleza de su dinamismo, representado de manera sencilla y lúdica: son obras que encandilan por la naturalidad y la facilidad, un balance despojado de las complejidades del género, el color o los antecedentes culturales, que deja la esencia de la pura belleza y de la alegría.
Es una danza de la vida caleidoscópica, fluida y siempre cambiante que evoca un estado de ánimo o genera asociaciones a través de la superposición de respuestas de su cincel, con el que realiza esculturas basadas en la finura de las formas, la calidad de la mano de obra y la fidelidad a los materiales, presentando al tallar o moldear cualquiera de ellos una asimetría elegante.
Tal vez, Toni Ferri represente con el movimiento la inestabilidad de la realidad y, así, abre un camino para evocar el cambio con rupturas frontales y usos de posiciones inestables, tensiones y caídas.
Sin embargo, el movimiento necesita no sólo espacio sino también tiempo para permitir que las formas se muevan y pasen por ese espacio.
Y es así como su escultura se convierte en un arte en acción, que modera con la corrección del sesgo inconsciente de la cultura que lo rodea y en la que él se integra, pero que de alguna manera es traicionada al no alimentarla meramente de sus antecedentes (de la alpargata al níspero, de los árabes a la Corona de Aragón), de ser así estaría muriendo su talento.
El arte en tratar la piedra del río Algar hizo famosas a las gentes de Callosa, que después utilizarían, la piedra amarilla de La Nucía. Toni Ferri utiliza desde arcilla hasta alcornoque, desde piedra hasta cemento. No hay barreras para él. Creo firmemente que es capaz de entrar al espacio interior de una piedra o de un árbol en armonía: la naturaleza lo es todo. Y talla, como librepensador, con su mazo y su cincel liberando de dogmas a las artes plásticas, también.
Deja una respuesta